La amante es la mujer más hermosa del mundo
durante algunas horas por semana.
(anónimo)
durante algunas horas por semana.
(anónimo)
Existen muchas formas de clasificar a las mujeres. Hay quienes se dedican a eso. Yo, por mi parte, siempre fui de lenguaje audiovisual: me crié viendo películas, por lo que mi criterio favorito para entender a las mujeres -o al menos el más utilizado- es el del cine.
Un tipo de mujer o de personaje femenino que más atrae mi atención es el de la amante. La amante es una mujer, ante todo, especial. Tiene un carácter fuerte, llamativo - es imposible no notarla en cualquier tipo de reunión social. Como si su presencia atrajera reflectores de atención, a pesar de estar discretamente conversando en un rincón con un hombre cuyos ojos clava en su escote. Es poseedora de una sensualidad única, aún no siendo la más hermosa de la sala. Hay algo en la forma en la que sostiene el cigarrillo, o en el beso que deja marcado sobre la copa de vino que despierta curiosidad y erecciones.
La amante pertenece al club de los solitarios que deciden romper las reglas sociales castigadas por las miradas indiscretas y los programas de chimentos. Son mujeres solas, en el sentido más profundo de la palabra. Pero no porque su cama esté vacía más días a la semana que la de otra. Su vida sentimental se basa en el rechazo a exigir monogamia, lo cual la separa mucho de sus congéneres. Las amantes son el cáncer de las casadas, se come su matrimonio por dentro. Por eso las amantes son mujeres solitarias: sus congéneres las abandonan y las castigan. Por eso en las películas la amante siempre es mala: porque es la enemiga de la protagonista. Porque es la otra.
La duda que ha nacido en mi cabeza y empieza a germinar su semilla en este post, es por qué siempre se las ve en ese rol. ¿Cuál es la vida de una amante? ¿Qué siente, qué piensa? ¿Una amante es una mujer que toma la decisión de la soledad por un hombre? ¿Es una mujer feliz?...
Mmm...
Yo creo que puede serlo...
Yo creo que puede serlo...