martes, octubre 26, 2010

Found footage "Cinco historias para ellas"




Trabajo práctico para la materia Visión I de la Universidad del Cine. Material original: "Cinco historias para ellas" (Erika Lust, 2007).

Transexualidad global

Hace días que mi fantasía de bondi se reitera cada vez que consigo sentarme. Imagino qué pasaría si un día, sin explicación alguna, todos los hombres despertaran como mujeres, y las mujeres amanecieran hombres.

Primero, cundiría el pánico. ¿Cómo explicar este fenómeno de transexualidad espontánea a escala global? El chabón de TN... bueno, la mujer, intentando dar la cara en los estudios, comentando un suceso que a él mismo, a vista de todos, le ha afectado. Mostraría un informe donde se ve hombres y mujeres, desconocidos, que no aporta a graficar la situación.

Los presidentes del mundo, países y corporaciones, se volvería mayoría femenina. ¿Qué influencia tendría esto en la polítical global? Me importa delirar acerca de otro tópico. Imagino cómo reaccionaría toda la gente que conozco. ¿Quién se atrevería a coger con su nuevo cuerpo por primera vez? Está clarísimo que en lo que de masturbación se trata, todos lo harían al primer momento de privacidad. Pero, ¿qué hay del sexo? Las personas heterosexuales, comenzarían a ver su género original como sexualmente apetitoso?

Algo me dice que las mujeres originales serían las primeras en avanzar. Imagino, de repente, tener porogona. Si los hombres quieren ponerla constantemente, una mujer devenida en hombre debería heredar esa energía. Imagino a los ex-hombres pensando a qué ex-mujer llamar para ser penetrado por primera vez. Elegirían bien, estoy segura. Alguien con quien tengan confianza para un momento tan íntimo. Al fin y al cabo, es su primera vez como mujeres.

Por mi parte, aprovecharía todas las oportunidades. Saldría de cacería machote, mearía de parado, me cagaría a trompadas. Tendría sexo con una mujer, y la haría gozar como nunca gozó como hombre. También llamaría a alguna ex-amiga yaoi friendly para que tengamos una dura sesión de sexo gay.

Pero eso sí, después de un tiempo, cuando todos ya nos hubiéramos acostumbrado al cambio, quisiera que todo volviese a la normalidad. Me gusta demasiado ser mujer. Sobtre todo porque no estoy obligada a lidiar con ellas. Y nada hay más histérico que un chabón devenido minitah.